Hombre comprometido, transparente y amoroso. Julien es un guía delicado, sensible e intuitivo. Una de sus grandes virtudes es la entrega generosa de conocimiento, prácticas sensoriales, corporales y espirituales.
Después de estudios universitarios en literatura y filosofía, y después de haber iniciado una carrera de profesor de lengua en Francia, poco a poco se volvió hacia el trabajo corporal y artístico a través del teatro, el mimo y la capoeira, que estudió en Brasil.
Pero fue el encuentro del yoga y la meditación lo que marcó un gran viraje en su vida, invitándolo a formarse como instructor de yoga y a explorar en particular el yoga de Cachemira, una rama moderna del shivaísmo de Cachemira, corriente india filosófica y espiritual particularmente adaptada a nuestro tiempo.
Al mismo tiempo, un llamado por volver a lo vegetal lo llevó a hacer retiros en la selva amazónica peruana con un maestro curandero (tradición vegetalista) y a tomar yagé con hombres sabedores en Colombia. Estas escuelas antiguas y sagradas le permitieron hacer un trabajo amplio y reflexivo en sí mismo, creando un vínculo estrecho con el mundo vegetal.
Inspirado por las plantas, los maestros y estas experiencias transformadoras, desarrolló el uso de los sonidos y de la vibración como potencializador de curación, y elaboró un tipo de yoga que denomina yoga sensorial. Es una práctica que enfatiza la escucha profunda, la sensibilidad, el movimiento orgánico y la respiración espaciosa para acceder a la tranquilidad.
Facilita espacios para grupos y de forma personalizada desde hace 15 años, combinando introspección y meditación, sonidos, trabajo físico-sensorial y eventualmente plantas.
Actualmente vive en Colombia, en las montañas de Silvania, donde cuida su jardín de medicinas y comparte sus experiencias con apertura, compromiso, entrega genuina y cariño.